jueves, 4 de diciembre de 2008

Científicos piden al Ministerio que considere el sebadal canario en riesgo de desaparición

EFE. Destacados miembros de la comunidad científica canaria pedirán al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Terrestre y Marino la calificación de los sebadales como hábitat en peligro de desaparición, y han acusado al Gobierno regional de "jugar con fuego" al proponer su descatalogación.

Con este propósito han elaborado un informe científicos de las dos universidades canarias, que presentaron hoy en rueda de prensa el catedrático emérito de la Universidad de La Laguna Woldfredo Wildpret; el catedrático de Biología Marina Alberto Brito; el profesor titular de Ecología José María Fernández-Palacios y el profesor de Biología Animal Jorge Núñez, todos del mismo centro.

En el informe se destaca la importancia de este hábitat para el futuro de los fondos marinos de Canarias y se alerta sobre su grave situación, pues las praderas de "fanerógmas marinas" -en donde se encuentran los sebadales- son unos de los hábitats más amenazados del planeta, con un nivel de desaparición que oscila entre el 1 y el 2 por ciento anual, cuatro veces superior a las selvas tropicales.

También se detalla "sin ningún género de dudas" que la situación del sebadal en Canarias "es de clara regresión general" por la cantidad de impactos que sufren, "todos causados por el ser humano", y afirman que su superficie total en todas las islas ha retrocedido y actualmente ocupa como máximo unos 60 kilómetros cuadrados.

Por ello resulta "incomprensible" que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación Territorial del Gobierno de Canarias, que debe velar por su conservación, sea la que esté tramitando "una importante rebaja en su nivel de protección", añaden.

Para los científicos resulta "aún más incomprensible" que esta medida se esté tomando "únicamente para avalar la construcción del puerto de Granadilla de Abona", lo que afecta a parte de la población de sebadales más importante de Tenerife, el que se prolonga de Tajao a Montaña Roja.

"Este sebadal es sin duda el más importante de la isla y uno de los primeros de Canarias, tiene una importancia ecológica fundamental y por ello resulta inadmisible su descatalogación", añaden.

El catedrático emérito Wolfredo Wildpret consideró "sorprendente" la decisión adoptada por el Gobierno regional, que además "da la espalda" al conocimiento científico en este ámbito, y precisó que la "brutal agresión" que sufren estos espacios naturales ha sido "catastrófica".

Wildpret subrayó además "la profunda tristeza" que le produce este hecho y destacó que en el informe científico "no hay un ápice de demagogia ni radicalismo", sino una reflexión "debidamente razonada".

José María Fernández Palacios, profesor titular de Ecología de La Laguna, señaló que el informe ha sido elaborado por los científicos que mejor conocen "el funcionamiento, la dinámica y la estructura de los sebadales en Canarias" en un intento de que el Ministerio los proteja, ya que la Administración canaria "está jugando con fuego" al proponer su descatalogación para seguir adelante con sus proyectos de infraestructuras.

El catedrático de Biología Marina Alberto Brito dijo que rebajar el nivel de protección de los sebadales "prácticamente los condena a su desaparición" y subrayó que este hábitat es además "extremadamente sensible" al cambio climático, que ya sufre con el aumento de temperatura del mar.

Explicó que los sebadales tienen una función "muy importante" porque se trata de plantas con raíces que regulan el flujo de la arena a la playa, y por ello resultan fundamentales en las zonas del litoral con dunas.

Jorge Núñez, profesor de Biología Animal, subrayó que sin la acción de los sebadales la arena se fija a mayor profundidad y las playas quedan "como un pedregal", comentó que cada uno de estos espacios es "único" y advirtió de que se proyecta construir el puerto de Granadilla de Abona "justo sobre la zona de máxima diversidad" del sebadal de esta zona.

Los científicos alertaron de que los daños causados a los sebadales son irreversibles y ejemplo de ello es la desaparición de estos hábitats en Madeira, donde se arrojaron al mar escombros procedentes de la construcción de túneles.

En Canarias han desaparecido prácticamente en El Hierro y La Palma, queda un poco en La Gomera y en Tenerife apenas quedan "manchas" del gran sebadal que se extendía desde Antequera hasta Candelaria, y sólo quedan "residuos" del que hubo en Las Galletas, mientras que en las islas orientales se conservan en las zonas de sotavento.

PUBLICADO EL ESCANDALOSO ANUNCIO POR EL QUE SE PRETENDE LA DESCATALOGACIÓN DE SEBADALES EN GRANADILLA

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